• Reconocer a Madre Clara María de Jesús como modelo de mujer íntegra comprometida con Dios, la familia, la iglesia y la sociedad.

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• Fomentar las relaciones interpersonales con una mirada hacia la evangelización desde la espiritualidad y carisma carmelitano, teniendo a Jesús como centro de nuestra vida. 

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• Promover la vivencia de valores que les prepare para su vida profesional y una sana convivencia.

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• Cultivar en los estudiantes las facultades intelectuales y el desarrollo de la capacidad del recto juicio.

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• Formar auténticos y verdaderos cristianos capaces de asumir sus propias responsabilidades en la sociedad y en la iglesia, logrando una verdadera síntesis entre fe, cultura y vida.

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• Fortalecer en los estudiantes destrezas, habilidades, principios morales y espirituales, que contribuyan a la formación humana, democrática y con pensamiento crítico.

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• Promover en la comunidad educativa la participación en actividades de innovación tecnológica, científico-culturales, religiosas, deportivas sociales y familiares.